Antes de finalizar el año en el que se celebra el IV centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, el grupo literario San Fernando y el teatral La Platea junto con el escritor y literato Pedro Ojeda se unieron para rendir este sencillo tributo al más célebre escritor en lengua española de todos los tiempos.
La lectura dramatizada e interpretada por miembros del grupo literario San Fernando y del conjunto teatral La Platea fue el inicio de un viernes cervantino muy particular en la Sede Social de Sierpes. La adversidad meteorológica provocó que, finalmente, este acto se realizara en el patio y no bajo el azulejo que homenajea en nuestra fachada al escritor como estaba anunciado. Aún así este acto estuvo animado gracias a las visitas que a esa misma hora estaba teniendo nuestro belén tradicional.
Al término de la lectura, Pedro Ojeda, escritor, profesor de Literatura española en la Universidad de Burgos y especializado en literatura contemporánea, sobre todo en poesía y teatro desde el siglo XIX hasta la actualidad, realizó una formidable disertación sobre la importancia de Sevilla en la obra de Cervantes. En su ponencia recordó que, en aquella época, la ciudad "estaba llena de niños como Rinconete y Cortadillo, y éstos le sirvieron para contar la historia de España imperial desde los de abajo". Posiblemente la calle Sierpes fue donde empezó las Novelas Ejemplares y podría haber iniciado El Quijote debido a las relaciones que tiene Sevilla en su obra. "Presencia que se debe al conocimiento profundo de la ciudad que alcanzó por la estancia en sus calles tras una vida tan azarosa anterior, justo cuando acaba de adoptar el apellido Saavedra, con todo lo que esto podría significar para reinventarse una de las varias veces que tuvo que hacerlo. Sevilla es una ciudad clave para la biografía cervantina y para su imaginario literario", como reflexionó Ojeda.