El pasado lunes, el Círculo Mercantil acogió la presentación del reto “Brazadas contra el Alzheimer” que llevará al socio Rafa Alcázar y su compañero Manu García a lanzarse al mar para dar visibilidad a esta enfermedad.
Fuente Foto: Lince
Cruzar el canal de Menorca, 38 km., entre 13 y 16 horas, sin neopreno, es una hazaña que sólo han conseguido realizar 19 personas. Y del 20 al 27 de agosto -día aún por determinar en función de las condiciones del mar- se espera que este número aumente en dos más. Rafa Alcázar y Manu García se han propuesto llevar a cabo esta gesta con el único fin de dar visibilidad y apoyo a la enfermedad del alzhéimer y a la asociación ASLA en Sevilla.
“Conocemos la dureza y crudeza de esta enfermedad porque la hemos vivido en nuestras propias familias y sabemos que tambalea lo mejor de ellas”, reconoció Manu durante el acto de presentación de ‘Brazadas contra el Alzheimer’, título que da nombre al reto que emprenderán. Por este motivo, en esta ocasión nadan para ofrecer su apoyo a ASLA, asociación en Sevilla que, además de ayudar a enfermos y promover la investigación para luchar contra la que ya es conocida como ‘epidemia del siglo XXI’, proporcionan formación e información a familiares para que los afectados por ella estén lo mejor atendidos y sea más fácil sobrellevarla.
No son novatos. Rafa y Manu ya se han lanzado al mar por sendas iniciativas solidarias. En 2017 cruzaron el Estrecho de Gibraltar para dar visibilidad a la Fibrosis Quística y el pasado año nadaron el ‘Swimming contra el cáncer’ desde Matalascañas a Sanlúcar “donde tuvimos que luchar contra el levante y el tiempo aumentó mucho ya que en ocasiones el barco al que seguíamos retrocedía”, recuerda Rafa. Pero nadar por un fin solidario “se convierte en el motor que nos ayuda a seguir dando brazadas una tras otra cuando llegan los momentos malos durante la travesía”, reconoce Manu.
La asociación que se encarga de organizar el cruce del canal de Menorca defiende el nado tradicional y esto significa no contar con ayuda externa, salvo los avituallamientos necesarios para no deshidratarse cada 45 minutos. “Eres tú contra el mar. Puedes o no puedes”, asegura Manu. “De ahí que nademos sin neopreno, con la alta probabilidad de picaduras de medusas”, explica. “Tampoco podremos nadar uno detrás del otro, parar fuera de los avituallamientos que tendremos que hacer obligatoriamente, aunque no tengamos ganas, para beber y comer alimentos con carbohidratos de reabsorción rápida, ni agarrarnos a la barca en estas paradas”, continúa este notario de profesión que conoció a Alcázar, abogado, cuando éste tuvo que trabajar para él. Una relación que se fue consolidando fuera del trabajo gracias a esta afición por la natación y un objetivo común: unir el deporte a un reto solidario.
Antonio Aguilar, presidente de la asociación ASLA en Sevilla, presente en este acto, además de agradecer la ayuda en la difusión al Círculo Mercantil y la solidaridad de estos dos aventurares, “una gesta grandiosa de dos valientes”, dio claves e incidió en lo importante que es para ellos la difusión. “Es esencial que la sociedad conozca esta enfermedad de la que nadie puede librarse”, aseguró. “Tenemos personas con 50 años con alzhéimer, gente que habla 7 idiomas, muy preparados a quienes les toca luchar contra ella”, explicó. Actualmente, la longevidad aumenta y eso implica que, con 85 años, el 80% de la población tenga demencia. “Hay que llegar a los estamentos para hacerles ver que las estadísticas hablan por sí solas, desgraciadamente esta enfermedad es imparable y esperamos que en 2050 se hayan triplicado los casos”. Para aprender a cuidarnos, conocer los terapias paliativas -no farmacológicas- y saber más acerca de ella, están las asociaciones donde se organizan charlas y talleres formativos, “tanto para pacientes como para cuidadores ya que un cuidador bien formado son dos vidas. La educación en este sentido es fundamental.”, concluyó Aguilar.
El Círculo Mercantil, y en esta ocasión sus instalaciones deportivas, fueron el escenario para presentar este reto, al igual que en las anteriores ocasiones. El presidente Práxedes Sánchez explicó el orgullo que supone contar entre sus socios con deportistas tan comprometidos, como es el caso de Rafa Alcázar que, junto a Manu, se marcan cada año retos más ambiciosos. “Para nosotros realizar estas aventuras son el estímulo para seguir entrenando y superarnos cada año”, explica Alcázar. Él mismo reconoce que tras Semana Santa, con una costilla rota y una neumonía, jamás se paró a pensar en suspender el reto. Al contrario. Una vez recuperado, entrenó muy duro para prepararse.
Aunque el objetivo no es el dinero sino dar visibilidad a la enfermedad, los protagonistas han puesto a disposición de todo aquel que quiera colaborar una cuenta bancaria: ES04 2100 2620 6002 1030 9035. Todos los donativos se destinarán a la asociación ASLA. La gesta se podrá seguir a través de la página de Facebook: Travesía Menorca Alzheimer.
Motivación, ganas e ilusión a raudales. Estos son los ingredientes principales para llevar a cabo un reto de estas características y ninguno de ellos les falta, por lo que el convencimiento de que lograrán superarlo es pleno.