El Círculo Mercantil, un lugar de convivencia.
Queridos socios y socias, cuando acabamos de cumplir ciento cuarenta y siete años, y ya cercanos a la gran efeméride que será nuestro CL Aniversario, me gustaría compartir con ustedes algunas reflexiones de lo que hemos sido y de lo que me gustaría que debiera ser nuestra institución.
El Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla se fundó el 25 de octubre de 1868 bajo la denominación de Centro Mercantil. Fue un grupo de comerciantes e industriales los que en aquellos difíciles años de la historia de España vieron la necesidad de crear una sociedad de instrucción y recreo para la clase proveniente del comercio. Esta sociedad debido a su carácter gremial no tardó en convertirse en una plataforma donde reivindicar todo aquello que al buen entender de los fundadores servía para defender los intereses del comercio y de la industria.
Así mismo, nuestra entidad siempre se caracterizó por la defensa de los intereses de nuestra ciudad, por la plena colaboración con otras instituciones, por su solidaridad en momentos de necesidad y por el fomento de la cultura y el deporte.
Pronto, el Círculo Mercantil se posicionó en nuestra ciudad como un lugar imprescindible para el desarrollo de la actividad comercial sevillana y nuestros socios convirtieron la calle Sierpes en un foro donde se vendía y compraban distintas mercancías y donde, como se decía, realizaban los tratos.
Así transcurrieron los años, pasando por momentos difíciles que siempre nuestra entidad supo afrontar con la colaboración, la determinación y la ilusión de todos sus socios.
Quizás fue en los años sesenta del nuevo siglo cuando nuestro Círculo empieza a cambiar su estrategia de cara al futuro, abriendo la entidad a las familias de los socios, desarrollando actividades destinadas a los hijos e hijas de los socios y fomentando la participación de todos ellos en actividades lúdicas, deportivas y culturales.
Fue en esta época cuando se inició el proyecto de construcción de unas instalaciones deportivas que promovió el crecimiento de nuestro cuerpo social, aumentó los servicios destinados a los socios y se crearon los principios de nuestra actual identidad.
Actualmente todas las socias y socios del Círculo Mercantil disfrutamos de una institución forjada con el esfuerzo de todas las personas que han dedicado su tiempo a que esta casa siga siendo lo que es y lo que me gustaría que nunca dejara de ser: un lugar de convivencia, un lugar de respeto y educación, un lugar de ocio y recreo, un lugar donde nuestros hijos se desarrollen en un ambiente sano y saludable, un lugar donde se fomente la cultura y el deporte, un lugar de esparcimiento y diversión y un lugar donde nunca exista la división y donde siempre los socios y socias en unión y armonía trabajen porque nuestro Círculo Mercantil siga siendo la institución señera que siempre fue.