“Creo que, tanto en el deporte, como en la vida en general, lo que se va a producir es que adquiramos ciertos comportamientos que teníamos olvidados y que eran necesarios para la convivencia”. Esta semana hemos tenido la oportunidad de conocer cómo están viviendo y adaptándose a las nuevas circunstancias en la sección de pádel a través del socio delegado y jugador, Daniel Gutiérrez.
Daniel Gutiérrez es delegado de la sección de pádel y jugador del equipo de veteranos al cual se incorporó este mismo año al cumplir los 40. El cuerpo técnico está conformado por el entrenador y coordinador de la Escuela de NetSport, Juan Motilla, y los capitanes de las diferentes categorías, Alejandro Da Silva y Macarena Smith. Todos ellos, fundamentales a la hora de organizar y preparar entrenamientos, convocatorias y tácticas para los diferentes compromisos competitivos que afrontan. “Además, contamos con la suerte de tener a Lola Chaves como enlace de la sección con la directiva, siempre pendiente de nuestras posibles necesidades en cuanto a logística y dinámica de grupo se refiere”, como nos cuenta Daniel.
¿Crees que está afectando la COVID 19 a la forma en que practicamos deporte?
Es indudable que la COVID 19 ha afectado a todos los puntos de la vida desde el momento de que no nos permite ser 100% libres en nuestro comportamiento. En el deporte ha afectado positiva y negativamente. A muchas personas más sedentarias les ha empujado a empezar a hacer ejercicio, a darse cuenta de lo necesario que es en su día a día. Andar, correr, montar en bicicleta, patinar... Para los deportes de equipo y de contacto, sobre todo, ha supuesto un contratiempo importante. Romper con una rutina establecida que te aporta salud física y mental o poder practicar el deporte que te gusta, pero sin ejecutarlo de la manera que lo has hecho siempre.
Mascarillas, distanciamiento social, higiene de manos. ¿Qué ha supuesto incorporar a la rutina de entrenamientos y práctica deportiva todas las normas actuales?
Han sido muchos meses de incertidumbre y cambios. Incluso aún se siguen debatiendo si son necesarias incorporar algunas pautas nuevas a la hora de practicar deporte o si realmente resulta fundamental seguir adoptando ciertos comportamientos que pueden 'frenar' el virus, pero ir en contra de otros aspectos de la salud. Concretamente en la sección de pádel el mayor debate que ha habido es el de si era necesario usar o no mascarilla para practicarlo.
En los meses de mayor contagio se incluyó para instalaciones cerradas pero los datos de incidencia han terminado demostrando que ni mucho menos la práctica del pádel supone un riesgo de contagio. Ahora en los últimos días nos hemos visto obligados a establecer como obligatorio el uso de la mascarilla en pista para obedecer la ley publicada en el BOE, pero esperamos que próximamente incluyan una modificación y retomemos, al menos en ese aspecto, la normalidad deseada.
¿Cómo os habéis adaptado en la sección a la normativa COVID?
Se instaló un dispensador de gel hidroalcohólico en el acceso a las pistas para proteger la zona más sensible durante el juego, ya que tenemos el contacto con la pala y las pelotas. Después desde la delegación de Deportes del CMIS nos informan puntualmente de los cambios que se producen en la normativa COVID y lo adaptamos a nuestro deporte. El adelanto horario en el cierre de las instalaciones por el toque de queda nos obligó a reducir un tramo de reserva de pista habitual y a ajustar en un par de ocasiones el sistema para que en todo momento fuera el más beneficioso para el socio. Además, desde la Escuela de Pádel la mayoría de estos meses se ha reducido el tiempo de las clases de 1 hora a 50 minutos para poder seguir ofreciendo el servicio a todos los socios que lo tenían contratado, con una capacidad de adaptación y de aprovechamiento de las clases ejemplar.
¿Crees que va a nacer una nueva forma de practicar deporte después de la experiencia que estamos viviendo?
Creo que, tanto en el deporte, como en la vida en general, lo que se va a producir es que adquiramos ciertos comportamientos que teníamos olvidados y que eran necesarios para la convivencia, que quizás vayan en contra de nuestro estilo de vida y que en muchas ocasiones habíamos llevado al extremo sin darnos cuenta de que pueden ser contraproducentes. No sé de qué modo afectará directamente al deporte, aunque seguro que, tal y como evoluciona la tecnología, surgirán nuevas herramientas que nos faciliten esa adaptación y nos permitan seguir disfrutando libremente del mismo.
¿Qué está siendo lo más difícil de la temporada? ¿Cuántos campeonatos se han aplazado, cuántos se han disputado y cuántos se prevén celebrar?
Lo más difícil, sin duda, está siendo el tema de la distancia de seguridad y la imposibilidad de juntarnos más de 100 personas a disfrutar del pádel como estábamos acostumbrados en el club. Afortunadamente, en mayor o menor medida, hemos podido seguir practicando el deporte que nos gusta, pero ni mucho menos de la forma que más nos gusta. El inicio del Estado de Alarma, hace ahora un año, coincidió con la celebración de las rondas finales del último torneo que hemos podido disputar en el club ante las restricciones y ya ha pasado un año. Estamos deseando poder retomar esa dinámica y confiamos en poder hacerlo en los próximos meses.
Respecto a los campeonatos que están en marcha, hace escasas semanas dio comienzo la Liga Provincial, en la que competimos con dos equipos veteranos, uno masculino y otro femenino, y en el mes de mayo, aproximadamente, está previsto que entre en liza la competición municipal, donde la intención es poner en liza un total de seis equipos.
¿Cómo se motiva a los deportistas en estas circunstancias? Puede que la psicología sea una parte fundamental en los entrenamientos…
Una vez superado el miedo a hacer deporte por el posible contacto con las personas la motivación suele ser máxima, ya que estás deseando volver a sentir las sensaciones que buscabas previamente. La labor en este caso sería la de ayudar a superar ese bloqueo que te impide salir de casa o retomar tu rutina en las pistas de pádel siendo consciente de que lo haces en unas circunstancias de seguridad absoluta. En lo que es la dinámica de juego y de comportamiento en pista lo que hay que frenar, y que también es complicado por el efecto positivo que genera en la pareja, es el tema de los gestos de apoyo dentro de la pista, que puede incluir contacto físico y hay que limitarlos al contacto entre palas o un cruce de miradas o palabras de complicidad.
¿La Covid ha unido o ha desunido a los equipos? ¿Ha ayudado a saber quién realmente está comprometido con el deporte y quién no?
Sinceramente, tratándose del tema de que hablamos no creo que sea una cuestión de compromiso con el deporte o no. Más bien es el compromiso con la vida. La de todos. Por desgracia casi todos hemos vivido ya casos cercanos de contagio por COVID y algunos han terminado con familiares o amigos fallecidos. Ahí es donde se ha demostrado más que nunca la unión del grupo. Ayudando a esas personas a salir de la tragedia personal que estaban viviendo y animándolos a seguir adelante, a vivir y seguir disfrutando del deporte, en este caso del pádel, con amigos y compañeros de equipo.
Háblame del futuro de la sección. ¿Cómo la ves a corto plazo?
Hablar del futuro de la sección de pádel nos obliga irremediablemente a pensar en disponer de un número mayor de pistas para practicar pádel en el club. Con la demanda que existe actualmente y el crecimiento que está experimentando este deporte, dos pistas resultan insuficientes para poder gestionar las necesidades de ocio del socio, atender las demandas de clases en la escuela, en las que existe lista de espera, y crecer competitivamente desde la base con los más jóvenes. A corto plazo los objetivos no pueden ser otros que recuperar la normalidad pre-pandemia a nivel de horarios y la posibilidad de realizar torneos en el interior de las instalaciones del club, que dinamizan la sección; seguir evolucionando en el juego y mejorando los resultados, tanto en la competición de veteranos como en las diferentes ligas de IMD.